La semana pasada me mandaron un correo muy cariñoso, en el que me comentaban que jamás habían asistido a un curso de patchwork.
Jamás habían entrado en una tienda llena de telas especializadas...
Jamás habían visto una exposición ni una feria.
Jamás había cosido como hobby con nadie...
¿Espe... tu me lo contarías?
Terminaba aquel correo...
Y una que es muy complaciente...
Te lo cuenta.
!Hola guapa!
Como mi pobre Patizanca se sentía tan triste,
en una casa de niños,
a los que solo les gusta el balón
y no les gustan nada las muñecas...
Este fin de Semana decidí irme a Madrid para hacerle una compañera.
El resultado ha sido esta Oca llamada Paquita.
En un principio se iba a llamar Esperancita...
pero en honor a su diseñadora le he cambiado el nombre.
Como Francesca me resultaba demasiado dulce,
Y Paca, su traducción al español...
algo fuerte habiendose gestado en Las Rozas...
algo fuerte habiendose gestado en Las Rozas...
Finalmente es PAQUITA.
Esta era la versión de Francesca,
pero como yo la quería un poquito más
country, Silvia me buscó estas telas.
La tienda anfitriona era
"La tertulia del Patch" en Madrid.
Una tienda muy entrañable,
chiquitilla pero con telas muy muy bonitas.
Las anfitrionas, un encanto,
La Profe... super linda, solo hablaba en italiano...
Y CON LAS MANOS...
es increíble como una persona puede expresar
y enseñar tanto con las manos.
Su libro... me lo tuve que comprar...
aunque no esté en español.. es divino.
Por fin Cristina me enseñó a utilizar
los palillos chinos...
!No te acostarás sin aprender algo nuevo!
me decía siempre mi abuelo.
!No te acostarás sin aprender algo nuevo!
me decía siempre mi abuelo.
La dedicatoria.
Y ahora... el curso.
Esto es lo primero que ves sobre tu mesa.
Esto es lo primero que ves sobre tu mesa.
Una parte fundamental en un curso...
es que te toque buena mesa.
Yo solo conocía a mi pelirroja preferida...
ella fue la culpable de que me apuntase.
Alli se sentó Montse...
que me comentó que ya coincidimos en otro hace unos años.
Una de las cosas que más me gusta de ir a un curso es reencontrarme con compis de otros cursos.
Bea y Begi sabía que iban.
Las que querais aprender a bordar Hardanger
no os podeis perder los cursos que dara allí Begi
Y conocer a otras nuevas...
que seguro que veré en otros cursos posteriores.
En un curso...también coses... hablas, coses...
y sigues hablando...
lo que se puede hablar en una reunión de mujeres.
Otra cosa muy importante, son las instalaciones.
La luz natural es algo fundamental
para poder coser a gusto.
Un magnifico ventanal presidía la sala.
Pero también hay que comer....
Que bien cocina esa señora...
y nos fuimos sin darle las gracias.
La morcilla... Encarna...
Que buena estaba la morcilla verdad?
Y luego llega el final.... la foto...del grupo...
Y los diplomas... si chica...
aquí salimos con diploma,
sin dinero pero con diploma y encima contentas.
¿Qué fue lo que más me sorprendió?
Sabía que me lo pasaría genial...
pues iba con Carola.
Sabía que era un curso bonito, pues todo el mundo que había hecho uno con Francesca, me lo había recomendado.
Pero lo que no sabía era lo bien montado que tienen los talleres.
En ningún momento me dio
sensación de agobio o muchedumbre.
Y sobre todo...
LOS TRABAJOS...
Que quilts más requetebonitos...
Cristina... CHAPÓ.
Mirar como cose esta mujer.
Os recomiendo que si estaís cerca... paseis.
Con cosas tan bonitas es imposible no concentrarse.
Y al día siguiente...
las que aguantaron
y otras más se quedaron para hacer este
precioso bolso y esta flor.
Yo no pude... otra vez será.
Hasta la próxima.
Ahora toca ver procesiones.
